Mil vidas (poesía)
Miro y leo, leo y miro.
Conociéndo el mundo como en un espacio vacío
de miradas,
en el infinito de la mente, la voz;
el silencio...
Era evidente
impalpable que Todo era así
imaginario.
De la última poesía al Mar
y espacio inmenso de prado
para correr de brazos abiertos.
Imaginario como la muerte,
como el dolor de lo que habita
atrapado en carnes,
Imaginario tan efímero como
el recuerdo,
como el conteo de la rutina,
como un sueño,
un instante
es solo pasado.
Al final del paréntesis,
continuar la marcha
con apetito de luz
hacia la última
sombra.